La singular evolución histórica de Benicàssim le ha dotado de un amplio patrimonio artístico del que disfrutar durante todo el año.
La ruta de las villas que transcurre en el paseo marítimo y que enmarcada entre el Hotel Voramar y la Torre de San vicente nos trasladará a la Belle Époque benicense y al apogeo del turismo señorial de finales del siglo XIX y principios del XX. Si nos adentramos en la ciudad nos encontramos con la Iglesia de Santo Tomás de Villanueva, o el Cine–Teatro que durante todo el año ofrece una variada programación de teatro, música, talleres y exposiciones.
Y si el patrimonio histórico tangible es importante, no lo son menos las fiestas populares. Desde las patronales en honor a San Antonio y Santa Águeda en enero, la romería a la patrona en febrero, a las de Santo Tomás de Villanueva en septiembre, pasando por la mágica noche de San Juan el 23 de Junio.
A finales del XIX y principios del XX, un selecto grupo de familias castellonenses y valencianas construyen en esta virginal bahía lo que se conoce como el “Biarritz valenciano”, un conjunto de villas de gran diversidad y riqueza arquitectónicas.
Hoy en día, la famosa Ruta de las Villas se divide en dos itinerarios, según la corriente artística predominante en el momento de construcción y el carácter de los residentes originarios.
Así pues, la ruta del “Infierno” debe su nombre a las escandalosas fiestas que se celebraban en las villas de esa zona, mientras que la ruta de la “Corte Celestial” se distinguía por la tranquilidad de sus calles. Ambas zonas quedan separadas por los jardines de Comín, conocidos popularmente como “el Limbo”.
Benicàssim ofrece un destino turístico especializado en turismo familiar. Una amplia oferta de alojamiento y restauración adaptada a las necesidades de las familias, especialmente enfocadas al público infantil.
La oferta se completa con un amplio abanico de actividades de animación infantil, propuestas de ocio y entretenimiento para toda la familia y playas certificadas con Bandera Azul de los Mares de Europa, con la “Q” de Calidad Turística y la Norma ISO 14001 de Gestión Medioambiental.
Benicàssim cuenta con diversas ofertas de ocio ecosaludables para disfrutar en familia. Rutas cicloturísticas: Ideal para aquellas familias que quieran conocer el paisaje de Benicàssim de forma tranquila y saludable. Un recorrido circular con un desnivel adaptado a los más pequeños que cuenta en su recorrido con áreas de descanso en las que disfrutar del entorno.
Por todo ello, Benicàssim cuenta con el sello de Municipio Turístico Familiar de Aturfam, asociación de Turismo Familiar de la Comunidad Valenciana, formando parte del Club de Producto de Turismo Familiar. Disfruta de Benicàssim en familia.
Dicen que todos los caminos conducen a Roma y que todos los festivales los tienes en Benicàssim. Seas como seas y escuches lo que escuches, encontrarás tu escapada ideal entre la variada oferta de festivales que año tras año vienen organizándose en Benicàssim, cada vez con mayor éxito. Desde el refrescante sonido pop que de la mano del FIB baña la ciudad en julio a los ritmos más sosegados que llenan las noches de junio durante el Festival de Blues o los ritmos tropicales del festival de reggae por excelencia, el Rototom Sunsplash, que se celebra durante el mes de agosto.
Alejarse del mundanal ruido al tiempo que visitas la Ciudad de los Festivales es sólo posible en Benicàssim, pues durante el mes de julio y en el marco incomparable que supone el Parque Natural del Desierto de las Palmas, tiene lugar el Ciclo de Música Sacra.
Pero como no sólo de música vive el hombre Benicàssim, brinda otras posibilidades. A los amantes del cine les espera en junio para ofrecerles una nueva edición del festival Cinemascore. Y los fervientes seguidores de las artes escénicas están de enhorabuena por partida doble, pues Benicàssim acoge tanto el Festival de Teatro con Buen Humor, que desde junio a septiembre permite disfrutar de compañías tanto nacionales como internacionales, y el Festival de Teatro Reclam que supone una apuesta en firme por los nuevos lenguajes de las artes escénicas.
La gastronomía de Benicàssim se caracteriza por la diversidad de sus productos propios de la dieta mediterránea. Pescados y mariscos, asados, sabrosos guisos, paellas y otros arroces forman parte de las diferentes recetas de la maestría culinaria de Benicàssim.
De postre, una variada repostería o las frutas frescas del lugar, como la uva de moscatel y la naranja de los huertos benicenses, pueden acompañarse con el famoso Licor Carmelitano, elaborado por los monjes del Desierto de las Palmas. Pero además de lo autóctono, Benicàssim ofrece mil opciones culinarias: desde selectos restaurantes hasta típicas tascas, tapas, hamburgueserías, bocaterías, restaurantes chinos, italianos, …
La vida moderna impone ritmos de vida que afectan directamente a nuestro bienestar y nuestra salud, por ello, cada vez son más las personas que buscan en sus períodos de descanso y vacaciones fórmulas de turismo que les permitan recuperarse del estrés, el cansancio… o de los malos hábitos ligados a ellos. Se trata de desconectar del estilo de vida frenético y agotador para encontrar el equilibrio entre cuerpo y mente.
Para lograr estos objetivos Benicàssim cuenta con un entorno inmejorable y con una serie de establecimientos especializados que estarán al servicio de turistas y visitantes.
Visita nuestros inmuebles en Benicassim